BOLIVIA: 226 AÑOS DESPUES DE KATARI Abraham Delgado Mancilla - 27.02.2007 21:58
La Ideología es filosofía; es fuerza física del pensamiento. La Ideología palpita, mejor, crepita dentro del cerebro del hombre (REINAGA Fausto, La Revolución Amaútica, Ediciones CAM, La Paz Bolivia 1981, p 57). El intelectual indianista Fausto Reinaga, define a la Ideología como una fuerza física del pensamiento, y esa fuerza física es el hecho político. Es decir, los hechos políticos tangibles son resultados de las acciones del hombre en funciones del Estado, como los administradores del Estado o denominados gobernadores, quienes plasman sus proyectos de Estado en función a sus ideologías. Grave sería si algún gobernador, no tuviese ideología política alguna, porque no estaría en los cánones del Ser político. Entonces, hoy en pleno debate político de la Asamblea Constituyente, Bolivia o Qollasuyu, es producto de sus administradores o gobernadores desde 1825. Si Bolivia es un país miserable, con altos índices de extrema pobreza, con más de la mitad de sus territorios perdidos desde su creación y un país sometido al extremo a las fuerzas externas. Simplemente es el reflejo de la capacidad constructiva o destructiva visionaria que tuvieron y tienen sus administradores. Por lo tanto cabe lanzar varias interrogantes, pero antes debemos hacer referencia a una parte de nuestra historia durante la colonia después de la invasión española donde encontramos en los pocos escritos, la existencia de grandes sublevaciones indígenas, y en la mayoría de estas, los objetivos fueron en su primacía los siguientes; instauración de los territorios indígenas, instauración de las autoridades indígenas y finalmente la instauración del gobierno indio. En síntesis, se propugnó la reconstitución del sistema económico, social y político. Y una de las insurrecciones que tuvo matices de lo afirmado y se trata de probar eso ahora aquí, fue sin duda la de Tupaj Katari. Sobre estos elementos, giró todas las movilizaciones, insurrecciones, toda otra forma de medidas contra la corona española y en contra la república actual. Las otras medidas de tipo reivindicacionistas, fueron simples argumentos para socializar el objetivo central de las medidas. En consecuencia, después de 226 años de la Insurgencia de Katari, cuando se debate dentro y fuera de la Asamblea Constituyente, sobre el tipo de estado a construir o refundar. Es ineludible lanzar algunos cuestionamientos para abrir el debate. ¿Cuál fue el proyecto de Estado de la Insurrección del 13 de marzo de 1781, si hubo?, ¿Cuál fue el proyecto de los gobernadores de la república desde 1825? y ¿Cuál es el proyecto de Estado del primer gobierno indígena?. A estas preguntas trataremos de dar respuestas en este pequeño esbozo. EL PROYECTO DE TUPAJ KATARI El movimiento insurreccional del 13 de marzo de 1781, que es el esfuerzo constante de más de 10 año de concientización, organización y movilización. No solo es un movimiento insurgente reivendicacionista. Los mas de 40 mil indios sublevados desde las planicies de El Alto, hoy una gran ciudad indígena de mas de 800 mil habitantes, han sido instruidos como un verdadero ejército indio que buscaba acabar con los españoles y mestizos. ¿Para qué acabarlos a los españoles y cual el propósito? Durante los 190 días de guerra, en diferentes territorios indios se logró anular a las autoridades españolas y sustituirlos por las autoridades indias. Katari propone limpiar a los mestizos y blancos de los territorios indios. Es decir, cuando anulan a la autoridad española y desconocen a las autoridades de la corona, pues está claro la intención de acabar con la invasión. Pero ahí no queda el atrevimiento de este movimiento insurgente, pues se proponen crear o reinstituir el Qollasuyu. Como uno de los elementos para afirmar esta hipótesis, en muy pocas páginas de la historia, se observa que Katari ordena a sus soldados a acabar con las autoridades, instituciones y la sociedad blanco-mestizo, por ejemplo ordena incendiar, saquear y destruir, iglesias, haciendas, oficinas e instituciones de la corona española. Dicho de otro modo, acabar con todos los bienes de los españoles y mestizos, así como sus instituciones políticas. En cuanto se refiere a sus autoridades políticas Katari ordena destituir, ahorcar y degollar a las autoridades españolas, así sean indios. Y en cuanto a la sociedad, Katari, ordena acabar con aquellos hombres y mujeres, que pareciesen vestidos a los españoles y con todos sus bienes. Como se verá, acabar con lo parecido al español, es pues acabar con la sociedad blanco mestizo y su cultura. He ahí el atrevido proyecto de Estado de Katari, otros dirán la República inconclusa en los tiempos de Katari. Un gobierno indio, una sociedad india y un sistema solidario reciproco indio. Un proyecto ambicioso en los tiempos de Katari. Aunque éste último, no es claro en este movimiento, pero de manera lógica, Katari no solo fue el gran comandante, sino en todas sus actividades insurgentes, fue visionario cósmico. De ahí, emana lo filosófico, y la filosofía es ideología, la ideología es pensamiento, finalmente este pensamiento se traduce en un proyecto. Este proyecto de Katari, podemos resumir en un Estado Indígena del Qollasuyu, Comunitario colectivista. Donde la visión de Estado del indígena es la permanente construcción comunitario de lo colectivo o de la cosa pública, donde el hombre es el servidor y constructor permanente de la comunidad para todos y no la comunidad como un bien de servicio para unos cuantos hombres. En breves frases, diríamos que en el indígena, es algo innato la permanente construcción comunitaria de la Casa Grande, que es la comunidad, para todos sin distinción ni exclusión alguna. LOS GOBIERNOS DE LA REPUBLICA Y SU PROYECTO Ahora nos toca analizar a grandes rasgos, ¿Cuál fue el proyecto de un Estado desde Simón Bolívar y terminando en el fugado Gonzalo Sánchez de Lozada? Sería muy fatigoso hacer el análisis de periodo tras periodo. Entonces, resumiendo, los gobernadores de la república occidental imaginan en tres vertientes la construcción del Estado; un Estado de servicio a sus gobernantes, la otra es un Estado de convivencia mundial ajustándose continuamente a las fuerzas externas y finalmente un Estado solo para los blancos y mestizos. Estas tres formas de construir el Estado han quedado en evidencia después de 180 años de la republica. Otros verán seguramente desde otras ópticas, ésta es la mía. Durante diferentes periodos de gobiernos, sean democráticos o dictatoriales, populistas o nacionalistas, etc. Los gobernantes y las élites de poder político, imaginan construir el Estado, destruyendo constantemente. Es decir, desmiembran territorios, entregan sus recursos naturales a los extranjeros, desnutren a sus habitantes y castigan a sus contrarios de diversas formas. Esto es la forma de construir el Estado, en otras palabras, la construcción del Estado es la construcción y el enriquecimiento de la clase política a través del Estado, al Estado se le ve como la única alternativa de solución a sus intereses personales y de aparato. En resumen, el Estado debe ser servidor de la élite política gobernante y su entorno. Mientras la sociedad que no es parte de sus intereses de los gobernantes, es ajena, por lo tanto solo se le da medidas sociales y económicas de sobre vivencia. En la segunda vertiente imaginativa o visión constructiva del Estado, el Estado en construcción permanente debe ser parte de la globalidad mundial y actor universal, para ello debe ajustarse a los convenios internacionales impuestos por los Estados poderosos, y entre ellos en el tema comercial y económico debe ser un estado alimentador de materias primas, debe privatizar sus recursos naturales para ser parte activa del modelo para no quedarse en el aislamiento y finalmente debe ser un Estado sumiso a las fuerzas externas. Finalmente el tercer tipo de Estado a construir es imaginado solo para la gente blanca y mestiza. Por lo tanto los indios son ajenos a este proyecto y sus instituciones son creadas a la medida de la cantidad de habitantes, necesidades y aspiraciones de ellos. Todo eso en función de sus posiciones ideológicas. En tanto, cuando los indios quisieron ser parte de este Estado en la última instancia, toda construcción de la cosa pública quedó chica y por decir, dichos actores clandestinos, exigieron ser parte de esta Casa Grande, fueron constantemente reprimidos. Entonces hoy, se resisten a que se amplié el Estado para todos, ¿porque? porque para ellos significa el reajuste de ventajas y beneficios que aun gozan. En resumen, este ha sido la visión o el imaginario histórico sobre el proyecto imaginado, diseñado e implementado durante la república, si acaso terminamos de llamar Proyecto, la construcción permanente del Estado desde la ideología occidental. Sus revoluciones por ejemplo, aunque en gran parte fue con la ayuda de los mismos indios, fueron a la medida de sus objetivos ideológicos por ellos y para ellos. Finalmente, queda claro una sola cosa, la destrucción permanente de la cosa pública y del Estado. EL GOBIERNO INDIGENA Y SU GRAN DISAFIO HISTORICO Hoy el primer presidente indígena y todo su entorno tiene el gran desafió de construir o sentar mínimamente bases de la construcción de un nuevo Estado. Para eso desde las campañas electorales, el gobernante indígena se ha propuesto instaurar una Asamblea Constituyente, muchas veces se dijo originaria. Ahora instalada la Asamblea dentro de ella debe nacer un nuevo modelo o tipo de Estado a ser implementado y construido permanentemente, pero creo que estamos muy lejos de aquello, porque hoy el gobierno ha perdido permanentemente la contundencia del poder y ha cedido a la derecha en muchas oportunidades. Eso significa que hoy tenemos un gobierno indígena débil, y cuando se es débil, las medidas como la Asamblea Constituyente fundacional u originaria, concluirán sin muchos resultados esperados, porque requieren de un gobierno capaz de imponerse en todos los escenarios posibles, eso no significa necesariamente dictadura. Dentro de la Asamblea, podemos ver solo dos visiones o si vale el término, dos proyectos de Estado, una la del gobierno, que en los discursos pretende imponer y crear mediante la Asamblea un Estado nuevo y la otra es la de la derecha, que pretende mantener el Estado actual, de la cual fueron parte históricamente, éste último. Obviamente ya no es ningún proyecto, pero ellos dirán que es un proyecto. La resistencia de los partidos tradicionales, reciclados con otras siglas y de las élites empresariales. Es por el temor al nacimiento del nuevo Estado de tipo comunitarista o colectivista, que pueden imponer los movimientos indígenas y sociales del país. Y esta medida a la derecha les estaría sepultándoles para siempre. Entonces, es de vida o muerte para ellos mantener este Estado, realizando simplemente algunos retoques, que más bien les beneficien para siempre, como con las pretendidas Autonomías departamentales, donde los principales recursos naturales sean de dominio departamental. A esta visión pertenecen las llamadas Autonomías departamentales, donde en sus propuestas, se pretende mantener un Estado centralista, pero esta vez de tipo departamental, con economía capitalista y los recursos deben pasar al dominio departamental, para que estos recursos sean de beneficio de los gobiernos departamentales y no de sus habitantes, y finalmente donde sus riquezas no sean socializadas. Para concluir sobre la visión de Estado que tienen los de la derecha, ellos ahora imaginan, crear republiquetas si la corriente de los movimientos sociales, indígenas y movimientos insurgentes con claridad ideológica persisten en imponer o crear dentro o fuera de la Asamblea Constituyente un nuevo Estado caracterizado en lo comunitario y colectivista social. Entonces la solución para los de la derecha separatista es la indipendización a través de la Nación Camba. Empezamos del último para terminar en el primero. El MAS en sus propuestas propone para sentar bases para ir construyendo el nuevo Estado. Aquí algunos elementos sobre sus planteamientos. Por ejemplo, se propone construir un Estado comunitario e indígena, intercultural y pluricultural, y autodeterminativo. Y en el tema de las autonomías se propone implementar autonomías indígenas, municipales, regionales y departamentales. Finalmente en lo económico, nos plantea un Estado a construir de tipo comunitario y social, pero con iniciativa privada. Es decir, en los pilares de las propuestas se rescata algo de lo comunitario y del marxismo, para terminar en lo mixto. Bueno los marxistas ortodoxos, en el tipo de economía, dirán que el MAS propone la economía mixta, otros dirán, el proyecto de Estado planteado y en plena discusión en la Asamblea, es de tipo indigenista. Pues yo simplemente hago un análisis de lo existente en las propuestas del partido en función de gobierno mi punto de vista será otra discusión aparte, aunque de hecho aquí existen algunos puntos de vista como una introducción. En síntesis, el actual partido de ible imaginar un proyecto de semejante tamaño. Donde se restituya los territorios indígenas con sus propios sistemas. Por lo tanto, queda claro que ante el posible fracaso anunciado, hay que implantar nuevas formas y estrategias de lucha global de los pueblos hasta lograr lo que nos hemos propuesto. Reconstruir un Estado Comunitario y colectivista. En honor a esta lucha de Katari en la ciudad de El Alto, de Bolivia se realizará un encuentro de varios jóvenes el 13 de marzo del presente año, para seguir profundizando el cambio y proseguir con el articulamiento de otro movimiento de una nueva generación. E-Mail: admancilla@gmail.com |